El nuevo Convenio 190 (2019) de la OIT, la necesidad de identificar EP en psicosociología y la evaluación ergonómica, focos de la jornada precongresual ORP del 2 de marzo en Mallorca

Ramón Ferrer explicó cómo se activaría el Convenio 190 (2019) de la OIT en la jornada precongresual de Palma de Mallorca y por la tarde Moncloa anunció que sería el primer país en ratificarlo

Casualidad o coincidencia… pero lo cierto es que así ocurrió. Palma de Mallorca acogió la jornada precongresual del ORP Conference ‘Temas de actualidad en ergonomía y psicosociología’ y la fecha coincidió con la reunión, en Moncloa, del presidente del gobierno español, Pedro Sánchez y la titular de la cartera de Trabajo, Yolanda Díaz, con Guy Ryder el director general de la organización mundial del trabajo (OIT).

La jornada de Palma de Mallorca del 2 de marzo tuvo como ponentes a: Javier Llaneza, presidente de la asociación española de ergonomía (AEE); Ramón Ferrer, profesor de la Universidad de Barcelona; y Ricardo Ros, profesor de la Universidad de Zaragoza. El debate contó con el testimonio de Carlos Senz, director del departamento de salud laboral de Meliá.

La coincidencia de ambos encuentros es que se trató el Convenio 190 (2019) de la OIT sobre violencia y acoso en el trabajo que, tal como explicó el profesor Ramón Ferrer, profesor titular del departamento de metodología de las ciencias del comportamiento de la Universidad de Barcelona, únicamente necesitaría que dos países lo ratificasen para que el resto de estados iniciasen la cadena.

Esto, finalmente, se cumplirá en breve ya que por la tarde el gobierno español anunció que sería el primer país en ratificar este convenio. El siguiente país en hacerlo, así ha trascendido a los medios de comunicación, será Uruguay.

Cambios sensibles sobre el acoso y/o violencia laboral

“La violencia y el acoso pueden definirse en la legislación nacional como concepto único o por separado. Se aplica violencia y acoso en el trabajo durante el trabajo, en relación con trabajo o como resultado del mismo” explicó Ferrer.

El convenio 190 (2019) de la OIT entiende la violencia y el acoso no solo en el lugar de trabajo, sino en los tránsitos del trabajador de casa al lugar donde desarrolla su labor profesional. El documento no tiene en cuenta el tipo de contrato; incluye el caso de becarias y becarios. Se extiende a las comunicaciones profesionales como mensajes, correos electrónicos o redes sociales.

El valor de la ergonomía forense

La jornada la inició la intervención de Javier Llaneza, presidente de la AEE , quien focalizó su ponencia en el efecto que la carga de trabajo tiene sobre la salud. Llaneza, además, puso énfasis en cuestiones tan relevantes como los efectos que los ERE tienen en el mundo del trabajo como es el caso del síndrome del superviviente o el presentismo laboral como consecuencias del estrés postraumático.

El presidente de la AEE puso en valor el papel del ergónomo forense como el especialista que puede evaluar las consecuencias, si las hay efectivamente o no, de los factores psicosociales. “No hay enfermedad profesional por factores sociales pero sí hay efectos psicosociales en casos de enfermedades musculo-esquelética. Hay que demostrar causa-efecto entre infartos y derrames cerebrales y accidentes de trabajo”. El ergónomo forense es quien puede llevar a cabo esta investigación.

Nuevos métodos de intervención en ergonomía

La evaluación ergonómica numérica frente a la apreciación subjetiva es, para Ricardo Ros, profesor de la Universidad de Zaragoza, una de las mejores herramientas, basadas en los nuevos métodos de intervención en ergonomía, para valorar el impacto del trabajo sobre la salud o el bienestar de los trabajadores en el ámbito músculo-esquelético.

El factor tiempo de trabajo y los factores de regularidad o de puntualidad junto con el espacio, postura, etcétera… aporta, para este investigador, la información más ponderada del impacto del trabajo sobre la persona.

Ros apuntó como nuevos métodos, aparte de los UNE utilizados desde 2009, los métodos: ISO TR12295, 3DSSPP, Corlett, CTD, Freivalds, HAMA, ROSA, MAPO, NIOSH, OCRA, OREGE, PLIBEL, QEC, REBA, RULA, FIOH, DORTMUND y sistemas de grabación en 3D. Ros señaló que los resultados son diferentes en función de las diferentes circunstancias de trabajo y, por supuesto, en función del método utilizado. Recomienda utilizar más de un método en función de la actividad a evaluar.

Para finalizar destacó que se debe considerar una evaluación realista integrando, en ergonomía, los factores de sexo. Los impactos sobre el organismo femenino y el masculino pueden ser muy diferentes en función de la actividad.

La casuística de las ‘kellys’, la hostelería y los cuidadores de mayores

Para finalizar los tres ponentes participaron en la mesa de debate ‘Gestión y evaluación de los riesgos ergonómicos y psicológicos’ que contó con el testimonio de Carlos Senz, director del departamento de salud laboral de Meliá. Las diferencias conceptuales de los requerimientos que tienen las camareras de hotel, conocidas popularmente como ‘kellys’ por diseño de las habitaciones, evolución de bares y restaurantes.

“El tema del envejecimiento poblacional en España es importante” destacó Senz haciendo referencia a que en el caso de las camareras de piso la vida laboral en España puede haberse iniciado a los 14 años y a los 50 el impacto ya es considerable. “Esto no es así en otros países donde estas tareas son complementarias a otras actividades” puntualizó.

Llaneza, en esta mesa, pidió la opinión de Ramón Ferrer, por el valor de sus notas técnicas, sobre el impacto psicosociológico que tiene otro sector: el de cuidado de mayores.

“Se trata de cuidar a los que cuidan porque la persona que cuida se encarga de la carga procesal y la carga emotiva de a quién está cuidando. Estamos entrando en protección. No hay que cuidar la salud mental sino prevenir que estas personas tengan deteriorada su salud mental” respondió Ferrer.